La gringada, fastidiada ya de cobrar 1,50 $ el litro de leche cruda ( unos 30 centavos de dólar al cambio oficial, unos 25 al cambio de la calle) hace como dos años esta parte, se puso a bloquear las fábricas. Pero las fábricas dijeron que si no le dejaban vender los quesos tampoco les iban a retirar la leche. Hicieron asambleas y decidieron no dejar entrar leche y salir producto, ergo, los camiones no salieron.
Desde luego un frenético comercio de entregas marginales a fábricas pequeñas no-bloqueadas por los piquetes se desarrolla, y los que no pueden entrar en eso se enfurecen. Si la turba encuentra camiones transportando, vuelca el contenido en la ruta.
Luego se llenaron los tanques enfriadores y hubo que empezar a tirar leche. Y siguen en esa.
Por supuesto la culpa la tendría el Gobierno y su regulación de precios y menosprecio por la exportación - "quieren que todos sembremos soja, así recaudan más" - los industriales, los supermercados, este país, Liniers que derrotó a las invasiones inglesas - "ya seríamos Australia!" - y si bien algo o mucho de todo eso hay también es cierto que artículos como la cuota Hilton (una cuota de carne seleccionada que Europa otorga cada año) o la leche en polvo están por el piso.
La leche de vaca o la carne buena la consumen los europeos que están de capa caída. Los siguientes grandes clientes lecheros son países árabes ahora en plena rebelión y con petróleo no muy caro o México, tampoco muy bien.
La contracara del Boom sojero provocado por el ascenso asiático es que productos del gusto europeo van quedando a la saga.
Por eso, así como hace siglo y medio se trajeron gringos para que desarrollen la industria del queso colorado y el salame picado fino ahora habría que traer chinos para que nos enseñen a hacer sus excelencias, lo que les guste a los ricos de allá. Nada de venderles la soja en bruto, hay que venderles la porquería esa del tofu, y high quality. Que si a los asiáticos el polvo de cuerno de rinoceronte negro les resulta afrodisíaco, a criar rinocerontes negros!. Dicen que a los coreanos y otros ojos rasgados les gusta el perro en la mesa: a carnear vacas para alimentar perros!. Filete de dogo argentino for export, carne exótica de las Pampas.
Si Sarmiento estuviera acá ya habría traído alguien que nos enseñe. Y el general Roca habría liquidado algunos piamonteses para hacerles lugar.
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